MI CONDUCTA, UN LEGADO
No hay nada mejor que actuar de una manera correcta y cómo lo haría Jesús,
Desde siempre hemos estado atentas a lo que las demás personas nos van a dejar como legado, y pensamos principalmente en nuestros papás, abuelitos, etc. Porque son personas cercanas a nosotras de las que queremos aprender e imitar comportamientos, pero ¿cuántas veces te has puesto a pensar en lo que tú vas a dejar como legado?
En el último año Dios me ha sacado de mi zona de confort y me ha llevado a lugares que no imaginaba, y en este proceso he podido descubrir y entender distintas situaciones que antes podían no gustarme o simplemente con las que no estaba de acuerdo; y un día me di cuenta que “el legado” no lo dejan únicamente las personas que ya no están con nosotras o personas mayores (como mucha gente piensa), sino que se trata del EJEMPLO.
Yo no sé si ya pensaste en el legado que quieres dejarle a tus futuros hijos o nietos, y yo sé que puedes pensar que es demasiado rápido para pensar en eso, pero déjame decirte que no. Yo tengo 18 años, y en los últimos meses me he dado cuenta que dejamos de hacer muchas cosas porque “todavía no es el tiempo”. Tengo una hermana de 10 años, y ella se fija en todo lo que hago y en lo que dejo de hacer. Últimamente le he puesto atención a cómo ella me ve y cómo actúa, y en ella, mi familia y yo podemos ver reflejadas actitudes y gestos míos. Puede sonar gracioso o dirás “qué exagerada Sofi”, pero este comportamiento ella lo imitó y se apropió de él, lo que significa que he dejado un legado, aunque sea pequeño, pero eso es. Y con el paso del tiempo ella será más observadora e imitará más cosas, por lo que entendí que el legado que le pienso dejar a mis hijos lo debo empezar a construir ahora. No puedo esperar a ser mamá para empezar a comportarme de la manera en que me gustaría que ellos se comporten, o esperar a que ellos crezcan y sean observadores para vestirme como quiero que ellos lo hagan.
Cuando muera, no quiero que mis amigos me recuerden de una manera y mi familia de otra, porque eso significaría que mi comportamiento y actitud cambiaron porque yo tenía en la cabeza “el legado que le dejaré a mis hijos”, en realidad prefiero ser una mujer que actuó correctamente y por eso mis hijos DECIDIERON seguir mis pasos. Y nada mejor que estar rodeada de personas que siguieron mi ejemplo, y no porque yo sea importante o porque sea una mujer perfecta e intachable, sino porque en mí pudieron ver a Jesús y eso hizo que cambiaran sus malos hábitos y su actitud.
Mi consejo es: no importa si tienes 15, 30 o 50 años, no hay nada mejor que actuar de una manera correcta y cómo lo haría Jesús, así impactarás vidas, y más de las que imaginas, y tu legado no será imitado solo por tu familia. Filipenses 2:5 “La actitud de ustedes debe ser como la de Cristo Jesús”.
759 Visitas,

Locutora en Gospel Revolution Radio, una hija de Dios comprometida con el llamado
de compartir el mensaje de salvación. Curiosa, perseverante, y siempre atenta a lo que Dios tiene preparado para mi vida.